El Partido Popular de Cataluña ha dado apoyo a todas las manifestaciones en contra de la ‘Ley Celaá’ celebradas hoy en Cataluña por ser una ley que se caracteriza “por intentar imponer una ideología, por su sectarismo, por su intento de desterrar los valores del mérito y del esfuerzo de la educación, y por excluir al castellano como lengua vehicular de nuestro sistema educativo”.

Así se ha expresado el presidente del PP de Barcelona, Óscar Ramírez, que ha asistido a la movilización organizada por la Asamblea por una Escuela Bilingüe, junto a la diputada en el Congreso de los Diputados, Llanos de Luna, y el secretario general del PPC, Daniel Serrano.

Óscar Ramírez ha denunciado que “es una ley que pisotea los pilares de la democracia y la Constitución española, ya que atenta directamente contra el derecho y la libertad de los padres y madres de poder escoger la educación que ellos deseen libremente para sus hijos al atacar a la escuela concertada, a la escuela diferenciada y a la educación especial”.

También ha lamentado que durante la tramitación de esta ley no se ha contado con la comunidad educativa para aprobar una ley de esta calado, y ha sido tramitada “de espaldas a la sociedad en pleno estado de alarma y sin contar con el preceptivo informe del Consejo de Estado”.

Por su parte, la diputada Popular, Llanos de Luna, ha recordado también que el Partido Popular presentó 156 enmiendas a esta ley, “aunque no han llegado ni a dos las que se han tenido en cuenta”.  Además “ha sido una ley que, a pesar de que va a determinar el futuro y la educación de nuestros hijos, se ha aprobado con un solo voto de diferencia, lo cual pone de manifiesto la división que ha provocado en la sociedad”.

Asimismo la diputada Popular ha señalado que “esta ley, además, se carga el castellano como lengua vehicular” con lo cual está en contra del artículo 3 de la Constitución en el que se recoge que el español es la lengua común en todo el territorio nacional y todos tenemos el deber de conocerla y el derecho a usarla y “en aquellas comunidades donde hay bilingüismo, como ocurre en Cataluña, se tiene que respetar el castellano como lengua vehicular, además del catalán en nuestra comunidad”.

Finalmente, Llanos de Luna ha hecho referencia a la reciente sentencia del TSJC en la que se afirma que se tiene que garantizar como mínimo se impartan el 25% de las clases en castellano, “algo que en Cataluña lamentablemente se está incumpliendo sistemáticamente”.