1. Proteger la convivencia. El respeto a la ley y a los derechos de todos son el camino para la convivencia en Cataluña y la reconciliación entre los catalanes.

 

• Renuncia explícita al conflicto contra el Estado de Derecho y la confrontación entre catalanes.

 

• Participar y liderar los debates en foros como la Conferencia de Presidentes autonómicos, el Consejo de Política Fiscal y Financiera o los Consejos Sectoriales.

 

• Reconvertir TV3 y de Catalunya Ràdio en medios plurales al servicio de una información veraz y neutral, potenciando el perfil profesional e independiente del ente.

 

2. Agenda de libertad económica. Cataluña necesita menos organismos públicos al servicio del nacionalismo y una administración más profesional y adaptada a las tecnologías.

 

• Eliminar intervencionismos políticos, desburocratizar, fomentar el voluntariado y defender las libertades individuales son condiciones necesarias para devolver el poder a la ciudadanía y garantizar el pluralismo.

 

• Alivio fiscal para reactivar la economía y proteger a la clase media:

 

• IRPF. Reducir la fiscalidad en los tramos de renta más bajos hasta un 5%, bajando el tipo impositivo del tramo autonómico y reduciendo a cinco el número de tramos haciéndolos coincidir con los tramos estatales.
• Bonificaciones IRPF. Bonificaciones para disminuir la carga fiscal sobre familias numerosas, gastos de guardería, libros de texto, aprendizaje extraescolar de lenguas extranjeras, gastos en cobertura sanitarias o incrementar la deducción por el alquiler de vivienda habitual de jóvenes y familias numerosas.
• Impuesto del Patrimonio. Mientras en Cataluña el mínimo exento se sitúa en 500.000€, en el resto de las comunidades está en la media de 700.000€; por ello debemos igualarnos a esta cifra, con el objetivo de que este impuesto acabe desapareciendo.
• Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones. Volver a la misma situación de 2011 cuando el PP consiguió una bonificación del 99% a todos los herederos de primer grado (cónyuges, descendientes y ascendientes).
• Impuesto de Transmisiones Patrimoniales. Bajar del 7% al 6% en el caso de transmisión de pisos de protección oficial, o en el caso de familias numerosas, menores de 32 años o personas con discapacidad pasar de tributar el 5% al 4%.
• Suprimir impuestos propios. Suprimir los impuestos de emisión de óxidos de nitrógeno a la atmósfera producida por aviación comercial y de emisión de gases y partículas a la atmósfera producido por la industria, el impuesto sobre bebidas azucaradas envasadas, el impuesto sobre activos no productivos de las personas jurídicas y el impuesto sobre las emisiones de dióxido de carbono de los vehículos de tracción mecánica.
• Exención del impuesto sobre estancias en establecimientos turísticos.

 

• Firmeza y la tolerancia cero contra la okupación y defensa de la propiedad privada.

 

• Reindustrializar Cataluña:

 

• Proteger el tejido empresarial, garantizando las medidas de protección y facilitando la liquidez, también es una llamada a replantear el modelo productivo.
• Impulsar la transformación digital del sector industrial a través de programas específicos y con el apoyo del Centre Tecnològic de Catalunya (Eurecat).
• Asegurar que las ayudas del Plan Next Generation EU lleguen a los sectores más necesitados, especialmente a las pequeñas y medianas empresas.
• Acompañar las empresas en el proceso de canalizar fondos europeos para mejorar la transformación de la economía y crear las bases de un crecimiento sostenible e inclusivo.
• Impulsar el programa de apoyo al sector de la automoción para favorecer la transición del sector y generar nuevas oportunidades de crecimiento y de creación de puestos de trabajo.

 

• Fortalecer el turismo: con una acción coordinada del conjunto de administraciones públicas que ponga en valor un sector crucial de la economía de Cataluña.

 

3. Una sociedad de bienestar. Defender un modelo de bienestar garantista que, con la colaboración público-privada, pueda ofrecer a todos los ciudadanos la posibilidad de elegir los mejores servicios posibles.

 

• Reforzar el sistema sanitario. La pandemia del coronavirus obliga a replantear las prioridades del gasto público de la Generalitat. Proteger y reforzar a los sanitarios, ofrecerles los recursos necesarios y aplicar las tecnologías son claves para evitar nuevos rebrotes o anticiparnos a otras pandemias.
  • Una auditoría técnica de la gestión de la pandemia que sirva de base para las futuras políticas de prevención y de salud pública.
  • Un plan de choque con carácter indefinido para reducir las elevadas listas de espera para visitas en la atención primaria, atención especializada, pruebas diagnósticas e intervenciones quirúrgicas, garantizando un tiempo máximo de espera.
  • Aprobar un nuevo plan de fortalecimiento y transformación de la atención primaria.
  • Adoptar medidas para hacer más atractivo el desarrollo profesional en el ámbito de la atención primaria, con el objetivo de retener talento profesional y recuperar profesionales que han optado por marchar, incluso, en el extranjero.

 

• Defender la libertad de escuelas e institutos para que puedan definir su modelo pedagógico y lingüístico, respetando el trilingüismo (25 % mínimo en cada lengua oficial) y unos contenidos comunes, y de las familias para poder elegir la mejor educación para sus hijos. Así, mejoraremos la enseñanza pública y protegeremos el modelo de las concertadas.

 

• Aumentar la oferta de plazas de guarderías públicas y concertadas.
• Aprobar un plan estratégico para avanzar en la garantía de la gratuidad y la universalidad de la etapa educativa 0-3 años en Cataluña, dando cumplimiento a la Moción 1 / XIV del Parlamento de Cataluña.
• Elaborar un plan para la eliminación de los barracones como aularios a la educación pública en el plazo de cinco años.

 

• Apoyo a las familias. Hacer de las políticas de apoyo a las familias el eje transversal de la acción del Gobierno. Actualizar la legislación de apoyo a las familias para adaptarla a las nuevas realidades.