Alejandro Fernández: “La admisión a trámite del TC del recurso del PP a los decretos de vivienda de la Generalitat son un primer paso importante para derogar una ley que ataca el derecho a la propiedad"

  • Alejandro Fernández: “Los decretos de la Generalitat son claramente inconstitucionales porque suponen un ataque frontal al derecho a la propiedad privada y una vulneración competencial en materia de derechos”

 

16 Julio 2020- El presidente del Partido Popular Catalán, Alejandro Fernández, se muestra satisfecho ante la admisión a trámite por parte del Tribunal Constitucional del recurso presentado por el Partido Popular contra los decretos de vivienda de la Generalitat, y en este sentido ha afirmado que “se trata de un primer paso importante para derogar una ley que ataca a los propietarios catalanes en un derecho fundamental”.

 

El presidente Popular ha recordado que el PPC se ha opuesto en todo momento a los decretos del Govern porque, además de convertir a Cataluña en una especie de paraíso ‘okupa’, “parecían hechos a medida de las mafias ilegales de ocupación, que actúan impunemente en Cataluña”. Además ha añadido que estos decretos “son un insulto tanto para los catalanes que esperan una vivienda social, como para las familias que deciden invertir y ahorrar a través de la vivienda o que incluso deciden convertir la vivienda en su proyecto empresarial sin que por ello tengan que ser calificados de especuladores”.

 

Asimismo, el presidente Popular considera inconstitucionales estos decretos (17/2019 y 1/2020) porque suponen “un ataque frontal al derecho a la propiedad privada y una vulneración competencial en materia de derechos”.

 

En este sentido Alejandro Fernández ha explicado que, tanto el Estatut de Cataluña como la Constitución, establecen que un derecho fundamental como el de la propiedad privada nunca puede ser alterado a través de un decreto Ley.

 

Finalmente, Alejandro Fernández ha reiterado que el Partido Popular no va a permitir que “Cataluña se convierta en un paraíso okupa ni en un infierno para las propietarios y para las familias catalanas, que de manera paciente y honrada, aguardan en listas de espera para una vivienda social sin ocupar la casa de nadie y sin dar una patada en la puerta de la casa de nadie”.